
Stellah Wairimu Bosire
La Dra. Stellah Wairimu Bosire es feminista, médico, abogada y profesional de la salud en el ámbito internacional, con más de 15 años de experiencia trabajando en la intersección de la equidad sanitaria, la justicia de género y el espacio cívico en toda África. Actualmente es directora ejecutiva del centro africano para los sistemas de salud y la justicia de género, una organización feminista panafricana que promueve la incidencia política interseccional, el cambio de políticas y la gobernanza inclusiva para desmantelar las desigualdades estructurales en materia de salud y género. Es licenciada en Medicina y Cirugía (MBChB) y en Derecho (LL.B), ambas por la Universidad de Nairobi, tiene un máster en gestión sanitaria por la Strathmore Business School y otro en política sanitaria global por la Universidad de Londres-LSHTM. La Dra. Bosire ha dirigido iniciativas de gran repercusión en más de una docena de países africanos, apoyando movimientos feministas, organizaciones de personas LGBTQ+ e indígenas y procesos de transformación de los sistemas sanitarios. Ha desempeñado cargos de liderazgo influyentes, como codirectora ejecutiva de UHAI-EASHRI, directora ejecutiva de la Asociación Médica de Kenia y vicepresidenta del Tribunal sobre el VIH/SIDA de Kenia. Su trabajo ha tendido puentes entre el gobierno, la sociedad civil, la filantropía y los actores multilaterales, movilizando más de 100 millones de dólares en subvenciones e influyendo en importantes reformas políticas.
Motivación:
Mi motivación para seguir formando parte de la Junta de CIVICUS se basa en la urgencia de este momento. En todo el mundo estamos siendo testigos de un asalto coordinado y cada vez mayor contra el espacio cívico, las instituciones democráticas y los derechos humanos por parte de regímenes autoritarios y fascistas. Las organizaciones de la sociedad civil están siendo criminalizadas, desfinanciadas, sometidas a vigilancia y deslegitimadas. Se ataca a activistas, especialmente a feministas, jóvenes, indígenas y comunidades históricamente marginadas. Los retrocesos que estamos experimentando amenazan con borrar los logros conseguidos con tanto esfuerzo durante décadas de organización, resistencia y construcción de movimientos. En este contexto, el papel de CIVICUS es más vital que nunca. Creo que CIVICUS no sólo debe defender el espacio cívico a escala mundial, sino también modelar el tipo de gobernanza, rendición de cuentas y solidaridad que la sociedad civil exige al mundo. Mi contribución se basa en un enfoque político e interseccional de la protección de las libertades cívicas y la creación conjunta de sistemas de justicia. Aporto un profundo conocimiento de la gobernanza impulsada por los movimientos, centrándome en las personas más afectadas para dar forma a la estrategia e impulsar la rendición de cuentas. Tras haber formado parte de la junta directiva en los últimos tres años -contribuyendo a los comités de operaciones y membresía y otras funciones estratégicas- sigo comprometida con el fortalecimiento de CIVICUS como institución, garantizando que sus estructuras de gobernanza sean resilientes, representativas y se basen en realidades vividas. También aporto una amplia experiencia en pensamiento estratégico, análisis jurídico, gobernanza y finanzas para el desarrollo, y estoy dispuesta a seguir apoyando a CIVICUS en su camino por terrenos políticos complejos, manteniéndome fiel a su misión de ampliar el espacio cívico, transformar el poder y hacer oír las voces de quienes se encuentran en los márgenes.
- ¿Cuál es tu cita favorita de alguien que te inspira?
"El fascismo habla de ideología, pero en realidad no es más que marketing: marketing para el poder. Se le reconoce por su necesidad de purga, por las estrategias que utiliza para purgar y por su terror a los programas verdaderamente democráticos. Se le reconoce por su determinación de convertir todos los servicios públicos en empresas privadas, todas las organizaciones sin ánimo de lucro en organizaciones con ánimo de lucro, de modo que desaparezca el pequeño pero protector espacio entre la administración y los negocios. Convierte a los ciudadanos en contribuyentes, de modo que los individuos se enfadan incluso con la noción de bien público. Convierte a los ciudadanos en contribuyentes, de modo que los individuos se enfadan incluso con la noción de bien público. Convierte a los vecinos en consumidores, de modo que la medida de nuestro valor como seres humanos no es nuestra humanidad, nuestra compasión o nuestra generosidad, sino lo que poseemos. Convierte la crianza de los hijos en un estado de pánico, de modo que votamos en contra de los intereses de nuestros propios hijos, en contra de su atención sanitaria, su educación y su seguridad frente a las armas. Y al efectuar estos cambios produce al capitalista perfecto, aquel que está dispuesto a matar a un ser humano por un producto (un par de zapatillas, una chaqueta, un coche) o a matar a generaciones por el control de productos (petróleo, drogas, fruta, oro)». - Toni Morrison
- ¿De qué habilidades te enorgulleces más o cuáles te gustaría aprender?
Soy movilizadora comunitaria y oradora :)
- ¿Cuál es su visión de la sociedad civil?
Mi visión de la sociedad civil se opone ferozmente a la mercantilización de la humanidad. Inspirándome en las palabras de Toni Morrison, preveo un mundo en el que la sociedad civil reclame el bien público, reconstruya la solidaridad y restablezca la compasión como medida de valor. Debe salvaguardar los programas democráticos de la captura del mercado, proteger los espacios sin ánimo de lucro de la privatización e insistir en que la gobernanza siga centrada en las personas y no en los beneficios. La sociedad civil debe ser audaz, orientada a la justicia sin complejos y profundamente arraigada en el cuidado colectivo, transformando a las personas en cocreadoras del cambio, a la ciudadanía en administradora de la equidad y a los movimientos en baluartes contra el fascismo, la codicia y la violencia sistémica.
- ¿Qué lecciones has aprendido del fracaso?
No se trata tanto de fracasar, sino de cómo reacciono ante el fracaso. Me he negado a quedarme atrapada en el momento y lo he aprovechado para aprender, desaprender y reorientarme hacia mejores resultados.